Calcular
Contar y sumar son las operaciones más sencillas, pero son la base del resto de operaciones aritméticas. Se puede restar mediante la suma del complementario, multiplicar mediante sumas reiteradas, y dividir mediante la reiteración de restas. En la escuela aprendemos la tabla de multiplicar, así como los procedimientos o “algoritmos” para sumar y restar, sabiendo acarrear, así como aquellos que permiten multiplicar y dividir. A veces incluso hemos podido practicar con juguetes pensados para aprender de forma divertida (III-1).
Lo que históricamente no ha resultado tan fácil ha sido llegar a diseñar y construir instrumentos mecánicos capaces de automatizar, parcial o totalmente, todas esas operaciones aritméticas. El precedente más antiguo, desaparecido durante siglos, fue la calculadora construida a finales del siglo XVII por el genio matemático universal Gottfried Leibniz, quien también estableció las bases del moderno Cálculo o Análisis Matemático. Algo antes, en 1673, inventó el mecanismo básico de su calculadora, conocido como cilindro escalonado de Leibniz, que sirvió de referencia para las calculadoras posteriores, inicialmente de construcción artesanal durante el siglo XVIII, y luego de producción industrial durante el XIX y primera mitad del XX.
Tras el éxito comercial del Aritmómetro del francés Charles X. Thomas de Colmar, y todas sus descendientes, a mediados del XX se alcanzaron los límites del cálculo mecánico con la asombrosa Curta (III-2), ejemplo de la máxima y mejor miniaturización en calculadoras pre-electrónicas; por su aspecto, fue también conocida popularmente como el molinillo de pimienta (the pepper grinder).
Después de automatizar la suma, los nombres de los aparatos empezaron a recordar al resto de operaciones aritméticas (III-3), mientras sus formas físicas se fueron diversificando (III-4), hasta llegar a poder imprimir operandos y resultados (III-4-3). Para usos individuales pero más exigentes y profesionales, algunos fabricantes desarrollaron calculadoras portátiles más robustas (III-5).
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